Descripción de la actividad

Durante esta jornada acompañé a M en todas sus rutinas: entrada al aula, desayuno, patio, comedor y dormitorio, tal como se recogen en su secuencia diaria (Rutinas diarias de M). Me ve en la sala antes de subir al aula y se acerca a mí para cogerme la mano y llevarme hacia las letras del alfabeto para que nombremos los sonidos (fonemas); se une su amigo A y estamos unos minutos allí.

Subimos al aula. Hoy llevaba la mochila y la chaqueta correctamente, hemos dejado la agenda en su lugar; se ha fijado en cómo estaban dispuestas las otras agendas y ha dejado la suya de la misma forma. El agua también la ha colocado en su lugar. Me pide “pintar”, pero primero hay que abrir las ventanas y cantar las canciones matinales. M participa e interactúa con un poco más de atención que otros días. Ha sido más obediente ante las instrucciones de la profesora, por ejemplo dejando su palo con la fotografía en el lugar correspondiente.

Después de la rutina indicada, pintamos. Recuerda y pide los dibujos que hemos hecho los días anteriores: líneas verticales y horizontales, el número 8, la naranja y dibujos con puntitos para repasar. M repasa de manera irregular, pero atiende a la instrucción.

Salimos a la biblioteca, le pido que se siente en el cojín y lo hace correctamente. Hoy ha venido el mossen, han bendecido a los alumnos y hemos cantado canciones de Navidad en inglés. M participa dando algunos saltitos y parece menos inquieto.

Llega la hora de desayunar. M ha cogido su fruta antes de tiempo; le acompaño a guardarla y atiende a la instrucción. Una vez termina la rutina preparatoria (recoger el aula, lavarse las manos), vamos a buscar el desayuno. Hoy no ha cogido nada de otros compañeros. No quería tirar el envase del zumo acabado; le enseño un refuerzo de EVA (números 0 y 8 en naranja) y tira el envase.

En el patio ha paseado detrás de mí, ha chutado la pelota una vez y ha permanecido unos minutos en el partido. Ha estirado del pelo a dos compañeros y ha pedido perdón correctamente mirando y levantando las manos para tocar la cara, no con palabras y un abrazo.

Observamos una imagen en los ventanales: la Virgen María, Jesús y el niño Jesús.

Al subir para asearse antes de la comida está agitado. Le muestro la respiración para bajar el ritmo y añade su gesto de señalar hacia un lado que rompe la idea de la respiración. Tras asearse vamos al comedor: se sienta y no quiere esperar para rezar; le pongo las manos en señal de rezo y se resiste. Le indico que coma despacio. Señala para cambiar el plato y le pido terminar el primero, lo hace con ayuda. Repite el primer plato. Del postre se le cae una parte y le digo que lo que se cae no se come, y atiende.

Después vamos al aula para asearse y prepararse para el descanso. Al ver la puerta del gimnasio no quiere entrar y corre hacia el material del pasillo; le indico que eso no es de M. Entra al gimnasio pero intenta salir; al decirle que no salimos muestra una rabieta. Cuando se cansa, lo llevo a su cama. Utilizo el material EVA (3 del número 8 y 3 del 0); los huele, se los pasa por la mejilla y le gustan. Con la canción “La lluna i la pruna” atiende a la consigna de cerrar los ojos y descansar. Le retiro el material EVA y finaliza el día para mí con M.

Objetivos de esta fase

– Acompañar a M en todas las rutinas y observar su respuesta en las transiciones.
– Reforzar la comprensión de consignas básicas y el orden de cada rutina.
– Favorecer la regulación del nivel de activación en aula, patio, comedor y descanso.
– Mantener la secuencia habitual para favorecer previsibilidad y seguridad.
– Potenciar el seguimiento de instrucciones breves y claras en momentos de mayor impulsividad.
– Promover interacciones ajustadas con pares y reparaciones sociales adecuadas.
– Facilitar la transición al descanso con elementos reguladores ya conocidos (canciones, objetos motivadores).

Cambio explícito introducido en la intervención

– Refuerzo visual motivador mediante material EVA (números 0 y 8) para facilitar conductas como tirar el envase del zumo.
– Uso del mismo material EVA en la preparación para el descanso como recurso sensorial regulador.
– Ajuste verbal específico en momentos de impulsividad anticipada, especialmente al inicio del desayuno y en la transición al gimnasio.
– Recordatorio explícito de la respiración como estrategia, aunque M añade gesto propio que interfiere parcialmente.
– Acompañamiento más directo para reparar interacciones sociales no adecuadas (tirar del pelo).

Reflexión personal basada teóricamente y evidencias

El patrón observado hoy confirma que M responde mejor cuando existe una secuencia predecible y cuando las indicaciones son breves y concretas. La anticipación verbal y la constancia en el formato de las instrucciones facilitan su participación. En momentos de impulsividad, la presencia de un elemento motivador (números, formas) genera una vía de reconducción rápida y eficaz.

Las reparaciones sociales espontáneas después de estirar del pelo son relevantes; aunque la conducta inicial es desajustada, la reparación es adecuada para su edad y nivel de desarrollo, mostrando sensibilidad a la reacción del otro.

En las transiciones hacia actividades menos deseadas (esperar para rezar, entrar al gimnasio), se observa un aumento de activación que coincide con lo observado en jornadas previas: las rupturas de rutina o los tiempos de espera incrementan la dificultad para sostener la regulación.

El uso del material EVA como apoyo sensorial y motivacional ha sido eficaz en más de un contexto; su función como regulador emerge con claridad en la transición al descanso, donde facilita el paso hacia la calma junto a la canción ya interiorizada.

Las evidencias de hoy continúan alineándose con la necesidad de apoyos consistentes dentro de contextos naturales, reforzando la importancia de la anticipación, la estructura y los elementos motivadores específicos ya descritos.

Evaluación de la intervención

La intervención ha sido funcional y ha permitido:

– Mejor seguimiento de consignas en aula (orden de materiales, participación en canciones).
– Mejor ajuste durante el desayuno y ausencia de conductas de coger comida ajena.
– Reparaciones sociales adecuadas tras interacciones desajustadas.
– Uso exitoso del material EVA para tirar el envase y para iniciar la relajación antes del descanso.
– Mayor estabilidad en el patio respecto a días anteriores, con participación breve en el juego.

Las dificultades principales han aparecido en:

– La espera al inicio del comedor.
– El momento de transición al gimnasio para dormir.
– La aparición puntual de rabieta en una transición no deseada.

Aun así, los elementos de regulación conocidos continúan siendo efectivos cuando se combinan con acompañamiento cercano, tiempos de espera y una estructura clara.

Observaciones personales

– M muestra consistencia en su interés por números y formas, especialmente el 8 y el 0, convirtiéndose en un recurso muy eficaz para redirigir.
– La reparación social tras tirar del pelo destaca positivamente.
– El gesto propio que añade a la respiración indica que aún requiere modelado más explícito para interiorizar la estrategia tal como se pretende.
– El nivel de activación fluctúa en función de la transición: mejora en aula y patio, aumenta en comedor y descanso.
– La anticipación verbal y el acompañamiento físico continúan siendo necesarios para sostener la regulación en los momentos más exigentes.

Recursos

– Material EVA (0 y 8).
– Canciones habituales (“La lluna i la pruna”, canciones matinales, canciones de Navidad en inglés).
– Cojines en la biblioteca.
– Dibujos previos que M reconoce y solicita (líneas, número 8, naranja, repaso).
– Apoyos verbales breves y repetidos.
– Espacios del centro: aula, biblioteca, patio, comedor, gimnasio.

Temporalización y responsables

Temporalización:
Jornada completa correspondiente a la rutina diaria: entrada, aula, desayuno, patio, comedor, aseo y descanso.

Responsables:
– Yo, como acompañamiento directo, observación y registro.
– Profesora de aula en la gestión de rutinas y apoyo en momentos clave.
– Personal del comedor y auxiliares del centro en las rutinas de desayuno, comedor, patio y descanso.